renta de la tierra de una determinada finca. Cuanto mayor sea la suma del capital que arroje la capitalización de la renta del suelo de una finca de determinada extensión, tanto más elevado será el valor de la tierra» (p. 114).
La palabra «cuantía» es, aquí, una necedad. ¿Para qué, en efecto, expresa esta palabra una proporción? El que [la capitalización a base de un tipo de interés del] 10 por 100 arroje más que [a base del] 20, es indudable; pero la unidad de medida, aquí, es 100. Hablar de « cuantía del valor de la tierra » es emplear la misma frase vaga que cuando se habla de la elevación o el descenso de los precios de las mercancías, en general.
El señor Rodbertus trata enseguida de investigar
«qué es lo que decide acerca de la cuantía de la ganancia del capital y de la renta de la tierra » (p. 115).
[a) Primera tesis de Rodbertus ]
Rodbertus investiga, ante todo, qué es lo que decide acerca de la « cuantía de la renta en general », qué es, por tanto, lo que determina la tasa de plusvalía .
«I) Partiendo de un valor dado del producto de una cantidad de trabajo dada o, lo que es lo mismo, de un producto nacional dado, la cuantía de la renta se halla, en general, en razón inversa de la cuantía del salario y en razón directa de la cuantía de la productividad del trabajo en general. Cuanto más [60] bajo sea el salario, más elevada es la renta; y cuanto mayor sea la productividad del trabajo en general, más bajo será el salario y, en consecuencia, más elevada la renta» (pp. 115 s .).
La «cuantía» de la renta —la tasa de plusvalía—, dice Rodbertus, depende de «la magnitud de esta parte que queda sobrante para la renta» (p. 117), es decir, de la parte que queda después de deducir del producto total el salario, para lo cual «… no se toma en consideración aquella parte del valor del producto que se destina a reponer el capital» (p. 117).
Esto está bien (quiero decir el que al considerar así la plusvalía «no se tome en consideración» la parte constante del capital).
Un punto de vista un tanto peregrino es el que expresa cuando dice que
«si el salario desciende, es decir, si pasa a representar una tasa menor del valor total del producto, disminuye toda el capital al que hay que imputar como ganancia la otra parte de la renta (o sea la ganancia industrial). Ahora bien, es solamente la tasa de la proporción entre el valor que se convierte en ganancia del capital o renta de la tierra con respecto al capital o, en su caso, el área de la tierra sobre la que en cuanto tal debe calcularse, lo que constituye la cuantía de aquélla. Si, por tanto, el salario deja libre un valor mayor para utilizarlo como renta, al capital reducido y al área de la tierra que sigue siendo la misma corresponderá un valor mayor en concepto de ganancia y renta de la tierra y la cifra proporciona] correspondiente entre ambos será mayor, lo que quiere decir que ambos juntos o la renta en general se habrán elevado… presuponiendo siempre que el valor del producto permanezca invariable… Por tanto, por el hecho de que disminuya el salario que cuesta el trabajo , ello por sí solo no quiere decir que sea menor el trabajo que cuesta el producto » (pp. 117 s .).
Esto último está bien. Pero es falso que, al descender el capital variable, o sea el capital invertido en salarios, tiene que disminuir el capital constante ; en otros términos, es falso que la tasa de ganancia tenga que aumentar, porque se eleve la tasa de la plusvalía . El salario puede descender, por ejemplo, porque aumente la productividad del trabajo, y esta mayor productividad se expresa siempre en el hecho de que el mismo obrero elabora una cantidad mayor de materia prima en el mismo tiempo, lo que quiere decir que aumenta esta parte del capital constante, que aumentan la maquinaria y su valor. Lo